Ventas minoristas de febrero aumentaron un 0,6 %

A pesar de ese incremento, menor al esperado, se percibe que los estadounidenses aún están recelosos con su dinero.
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Redacción Negocios Now

En febrero, los consumidores estadounidenses aumentaron un poco su gasto, sin embargo, tal incremento fue más débil del esperado, lo que significa que muchos de ellos se están volviendo más cautelosos con su dinero, de acuerdo con un reporte de Associated Press (AP).

Citando datos del Departamento de Comercio, el informe señaló que «las ventas minoristas aumentaron un 0,6 % el mes pasado después de caer un 1,1 % revisado en enero, arrastradas en parte por las inclemencias del tiempo».

«La cifra de febrero, puntualizó, también se vio impulsada en parte por los mayores precios de la gasolina, así como por mayores ventas de automóviles y un repunte en los materiales de construcción, que se vieron deprimidos por el clima severo en enero».

De acuerdo con AP, «excluyendo las ventas de gasolineras y concesionarios de automóviles, las ventas aumentaron un 0,3 %. El precio promedio nacional de la gasolina, entretanto, fue de $3,41 por galón, según AAA, frente a los $3,39 de hace una semana y los $3,26 del mes pasado».

La misma fuente reconoció que «los datos minoristas del Gobierno no están ajustados a la inflación, que aumentó un 0,4 % de enero a febrero, cifra superior a la del 0,3 % del mes anterior».

En cuanto al negocio en los grandes almacenes, el propio informe dijo que este «cayó un 0,2 %, mientras que las tiendas de ropa y complementos registraron una caída del 0,5 %. Las tiendas de muebles y artículos para el hogar, [por su parte], tuvieron una caída del 1,1 %, [al tiempo que] las ventas online mostraron una rara caída del 0,1 % [y] las tiendas de electrónica y electrodomésticos tuvieron un sólido aumento del 1,5 %».

En febrero, destacó, también hubo un desplazamiento del gasto desde bienes hacia servicios. Los restaurantes, por ejemplo, registraron un repunte del 0,4 %. Al parecer, «un mercado laboral fuerte y salarios crecientes han impulsado el gasto de los hogares, que también se ha vuelto irregular ante los crecientes costos del crédito y los precios más altos», precisó AP.