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Melissa Ballate: «Estoy orgullosa de la cultura y energía que tengo entre nuestras cuatro paredes»

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La fundadora de Blue Daring, compañía que este año suma dos décadas de existencia, repasa lo logrado hasta ahora y adelanta qué hará en los años siguientes.

Por Migdalis Pérez 

Pudo haber sido cualquier otro logro, sin embargo, para Melissa Ballate, fundadora de Blue Daring (BD), su principal satisfacción en dos décadas de desempeño al frente de su compañía, tiene que ver con su equipo. «Después de 20 años, la cosa de la que estoy más orgullosa, es la cultura y energía que tengo entre nuestras cuatro paredes».

La hija de un cubano y una dominicana, nacida en Chicago, Illinois, se regocija así cuando habla de su team de expertos, a quienes califica de «gente tan buena, muy talentosa y colaborativa». Según ella, para quien el factor humano es esencial, en BD «hay un espíritu de servicio, colaboración y respeto», que no se encuentra a menudo. 

Quizás por eso, precisamente, es que a Blue Daring le ha ido tan bien. Concebida como una empresa de servicios creativos, integrales y estratégicos, esta firma surgió el 1 de junio de 2003 y, desde entonces, no ha hecho más que consolidarse como una autoridad en su campo con clientes satisfechos tanto en el sector público como en el privado.

Clientes combo Toyota Motor North America, Toyota Mobility Foundation (International), LION y REUSO, se hallan entre los que han confiado en sus servicios.

 

El grano de arena en la playa gigante

Para esta especie de «grano de arena en una playa gigante», como se autodefine, construir su historia de éxito ha conllevado muchos esfuerzos, pero también muchas aventuras que le han servido «para levantar la cabeza y decir: “Hemos cambiado la cara de la ciudad, hemos influenciado en Chicago”». 

Según ella, gente con títulos importantes y altos cargos suelen llamar a su empresa para pedir consejo. También «tenemos organizaciones sin recursos que están haciendo cosas bonitas en la ciudad, cosas buenas para la gente; ayudando al Gobierno, y eso, puntualiza, es un tremendo honor». 

Por supuesto, qué menos podría esperar de su esfuerzo la otrora chica de 22 años, que un día decidió abandonar su trabajo en el mundo corporativo (con el que ya sostenía a su familia) para abrir su propia compañía.

«Si te hace feliz, hazlo», le dijo su madre entonces. Dicho y hecho. Apostó por su idea, trabajó duro, consiguió certificaciones (MBE, WBE, DBE y ACDBE) en Chicago, avanzó en el sector público y también triunfó en el privado, más que por esas credenciales, «por tener reputación y relaciones con gente que sabe que hacemos un buen trabajo». 

Ballate reconoce que las certificaciones han sido importantes para llegar a un cierto punto, a otro nivel, a ciertas audiencias, pero para avanzar más allá, al menos, para su empresa, asegura que la estrategia fue otra. 

La celebración, que 20 años sí es mucho

Para festejar estos 20 años, además de la fiesta ya celebrada, Ballate y su equipo están trabajando en The Creative Challenge”, un proyecto destinado a «crear  obras de arte influenciadas por los valores de Blue Daring», al tiempo que se preparan para hacer un libro, que también celebra su trabajo de dos décadas como branding and strategy partner.

Aparte de tener «clientes en muchas industrias», y seguir trabajando para las esferas pública y privada, «porque la diversificación es muy importante», la empresaria también impulsa operaciones en librerías y tiendas duty free en el aeropuerto O’Hare, de Chicago. 

En cuanto a planes para la próxima década, más bien prefiere hablar de estrategias. «Para mí, estos [próximos] años son para solidificar lo que ha funcionado, invertir en las personas que están siendo exitosas en mi compañía, [así como] en las relaciones que tenemos con socios y clientes». 

Por supuesto, para quien igualmente se define como muy humilde, para quien confiesa venir de la nada, «tener una empresa de 20 años, también es muy bonito». Dejemos que disfrute el logro entonces. Ella quiere, simple y llanamente, «saborear este momento».