Habitantes y turistas de Chicago ya podrán realizar apuestas dentro o cerca de los principales recintos deportivos de la ciudad luego de que el Concejo Municipal aprobó una propuesta sobre apuestas deportivas.
El Ayuntamiento dio luz verde a este tipo de actividad, a la que impuso un impuesto del dos por ciento sobre los ingresos brutos de la misma. Las casas de apuestas podrán abrir en o cerca de: Soldier Field, Wrigley Field, Guaranteed Rate Field, United Center y Wintrust Arena.
El plan para abrir casas de apuestas deportivas en Chicago se mantenía congelado a causa de un amplio rechazo. Este verano el concejal Walter Burnett Jr. (Dto. 27º) revivió la propuesta con el respaldo de la alcaldesa Lori Lightfoot y el cabildeo de los propietarios de los grandes equipos de la ciudad.
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De acuerdo con reportes periodísticos, el copropietario de los Cachorros de Chicago, Tom Ricketts, el propietario de los Blackhawks, Rocky Wirtz, y el de los Bulls y los White Sox, Jerry Reinsdorf pidieron apoyo a la ordenanza en una reunión virtual previa con el comité correspondiente.
Los empresarios argumentaron que los vecindarios de la ciudad merecen la oportunidad de beneficiarse de las apuestas deportivas legalizadas, las cuales “crearán cientos de empleos, millones de dólares en ingresos fiscales y recursos adicionales a los equipos profesionales”, dijo Ricketts.
La nueva ordenanza establece que las apuestas deportivas se permitirían en instalaciones dentro o cerca de los estadios de la ciudad, o en edificios en un radio de cinco cuadras de ellos. Las apuestas deportivas también se permitirían en el futuro casino de Chicago.
Los equipos deportivos pagarán una tarifa de licencia inicial de 50,000 dólares y 25,000 dólares en los años siguientes. Las apuestas se limitarán a un horario de 10 a.m. a medianoche de lunes a jueves; de 9 a.m. a medianoche los viernes y de 9 a.m. a 1 a.m. de sábado a domingo.
Los concejales agregaron un impuesto del 2 por ciento sobre los ingresos brutos por apuestas, cifra que se suma al gravamen del condado de Cook sobre las apuestas deportivas del 2%, y a la tasa impositiva del 15 % del estado, lo que eleva el impuesto total sobre los ingresos del juego al 19 %.
Varios concejales rechazaron el 2% de impuesto por considerarlo insuficiente. De acuerdo con un cálculo del Departamento de Presupuesto de Chicago significaría entre $ 400,000 y $ 500,000 por año para la ciudad.
La ordenanza también incluye la posibilidad para los propietarios de una licencia de apuestas deportivas de subcontratar con empresas de minorías y mujeres. La propuesta sufrió cambios en dos ocasiones para reunir el apoyo suficiente a la misma.
