Redacción Negocios Now
Los precios al consumidor en Estados Unidos repuntaron de nuevo el mes pasado, alcanzando un aumento del 3.5 % en los 12 meses terminados en marzo, lo que significa un aumento de la inflación mucho mayor de lo esperado, según los datos más recientes de la Oficina de Estadísticas Laborales.
El indice de inflación subyacente superó las previsiones por tercer mes consecutivo, lo que indica una persistente presión sobre los precios que probablemente retrasará cualquier recorte de las tasas de interés de la Reserva Federal hasta finales de año, indica el informe.
Por mes, los precios permanecieron sin cambios desde el aumento de 0.4 % de febrero, sin embargo, los economistas esperaban un aumento mensual de 0.3 % y una tasa anual del 3.4 %. El aumento en marzo es mayor al 3.2 % de febrero y marca la ganancia anual más alta en los últimos seis meses.
El mes pasado, los precios aumentaron en prácticamente todas las categorías, pero entre los factores que impulsaron la inflación estuvieron los crecientes precios de la gasolina, las altas hipotecas y alquileres, los seguros de automóviles, la atención médica, la vestimenta y la electricidad.
El índice de servicios, excluyendo vivienda, siguió superando la inflación general, aumentando un 0.5 % en el mes y un 5.3 % en el año, por lo que no es sólo la vivienda la que mantiene estancada la inflación de los servicios, según los datos del reporte.
Los servicios de atención médica, cuyos precios cayeron ligeramente en febrero, repuntaron un 0.6 % el mes pasado, mientras que los seguros de automóviles se dispararon un 2.6 %, llevando el aumento anual de precios a un 22.2 %.
Los precios de los comestibles, en la categoría comida en casa, se mantuvieron estables por segundo mes consecutivo, y los precios de los restaurantes se desaceleraron un 4.2 % anual, la tasa más baja desde junio de 2021. Los precios cayeron sólo en automóviles usados y nuevos, así como en combustible.
La inflación anual es mejor que hace dos años, cuando alcanzó un máximo de décadas de 9.1 %, pero persiste en mantenerse por arriba del 3 % este año, lo que complica la decisión de la Reserva Federal que requiere un avance más consistente hacia su objetivo del 2 % antes de iniciar el recorte de las tasas de interés.
Los especialistas consideraron que este informe muestra que el camino hacia una reducción de la inflación sigue siendo accidentado, significa un lastre para las finanzas ganadas por los estadounidenses, y que cualquier flexibilización de la política monetaria podría no ocurrir pronto, según reportes de agencias.
