Los vecindarios periféricos de Chicago podrían salir ganando si se prohíben las ventas de marihuana recreativa en el área central de la ciudad, valora la alcaldesa Lori Lightfoot en su propuesta de zonificación de marihuana legal que dio a conocer la semana pasada.
El plan prohíbe a los dispensarios operar en el Distrito de Negocios del centro, manteniendo esa área, que incluye la mayor parte del Loop y la Magnificent Mile, como una “zona de exclusión” que será “amigable para las familias”. La propuesta pretende garantizar que la legalización del cannabis se implemente de manera segura y maximizando las oportunidades económicas en las comunidades de la ciudad.
La ordenanza establece siete zonas para dispensarios de marihuana recreativa en toda la ciudad, que inicialmente limitarán el número de dispensarios a siete, para garantizar una distribución equitativa de estos sitios de comercialización de cannabis en toda la ciudad, según indica.
Las regulaciones de zonificación restringirán la apertura de establecimientos comerciales de marihuana para uso de adultos a 500 pies de una escuela, y en zonas residenciales. Ratifica que de acuerdo con la ley estatal, el uso de productos de cannabis estará prohibido en todos los lugares públicos de la ciudad y por jóvenes menores de 21 años.
“Diseñada en asociación con defensores de la comunidad, líderes empresariales, expertos en políticas y profesionales del cannabis, la nueva ordenanza sentará las bases de cómo Chicago regula esta nueva industria y la aprovecha para expandir la riqueza y la equidad social para los residentes de la ciudad”, expresa la alcaldesa en la propuesta.
Y agrega que al trabajar con miembros de la comunidad, empresas, funcionarios electos y otros socios a nivel local y estatal, se asegura que la legalización genere nuevos ingresos para la ciudad, y oportunidades únicas para empresarios de comunidades víctimas de la guerra contra las drogas, “para estar a la vanguardia del desarrollo de la equidad y la riqueza de esta industria emergente”.
