Redacción Negocios Now
La elección de la estructura de negocios depende de varios factores, entre ellos, la responsabilidad legal, los impuestos y la estructura de gestión. Si estás a punto de abrir tu pequeña empresa, considera opciones como sole proprietorship, LLC, o corporación, entre otras, evaluando las ventajas y desventajas de cada una en dependencia de tus necesidades y objetivos empresariales.
Desde luego, consultar con un profesional legal o contable puede proporcionarte orientación específica para tu situación. Pero en lo que consigues esa ayuda, aquí te explicamos someramente las características de las principales estructuras empresariales, tal como las describe la SBA, para que vayas teniendo una idea más clara acerca de este tema.
Propietario único (sole proprietorship): En esta estructura el dueño del negocio tiene el control total de su empresa, es el único responsable de todas las deudas y obligaciones, y es quien proporciona el capital. Bajo esta clasificación es común encontrar pequeños emprendimientos, como consultores independientes, diseñadores freelance, tiendas locales y servicios personales, por ejemplo, peluquería o entrenamiento físico.
LLC (Compañía de Responsabilidad Limitada): En esta estructura los miembros normalmente no son responsables de las deudas y obligaciones, al tiempo que los ingresos pasan a los miembros, quienes pueden vender intereses. La LLC es apropiada para cualquier tipo de empresa comercial, excepto bancos y compañías de seguros. Algunos ejemplos de negocios aceptables son: granja, minería, construcción, manufactura, transporte, comercio mayorista, agentes de seguros, agentes de bienes raíces, hoteles, y servicios personales, de negocios, venta de automóviles, salud, escritura, contabilidad y arquitectura.
Corporación: Esta estructura está basada en el porcentaje de acciones. En ella, los accionistas eligen a los directores que administran el negocio, y los accionistas normalmente no son responsables de las deudas y obligaciones. Las corporaciones tipo C, como Apple y Microsoft, por ejemplo, pagan impuestos a la tasa corporativa y luego, nuevamente, si se distribuyen a los accionistas en dividendos. Las corporaciones tipo S, como startups tecnológicas y consultoras, entretanto, permiten que las ganancias y algunas pérdidas pasen a los ingresos personales de los accionistas, evitando la tasa de impuestos corporativos; pero no las distribuciones de accionistas. En cuanto a las acciones, estas se pueden vender para aumentar el capital, aplicándose las leyes de valores.
Sociedad limitada: La sociedad limitada sólo puede tener un socio general, quien tiene un mayor control y una responsabilidad ilimitada. El socio general no tiene límites en los dividendos de ganancias y paga impuestos sobre el trabajo por cuenta propia. Los socios limitados, por su parte, invierten capital, pero tienen responsabilidad limitada, no están involucrados en el manejo diario y generalmente no pueden perder más que el capital que han invertido. Este tipo de estructura se aplica generalmente en empresas de bienes raíces, petróleo y gas, alquiler de equipos y maquinarias, y sociedades familiares.