Imagine que usted llegue a un cajero y, con una sencilla operación, salga en la pantalla un banquero, a quien pueda solicitarle una tarjeta de débito y otros servicios bancarios, como si lo estuviera viendo en persona y hasta hablándole en español, si así lo prefiere.
O imagine retirar dinero con la ayuda de una aplicación en su celular. Así puede ordenar desde su casa o su auto el retiro de la cantidad deseada, va con su teléfono al cajero y, en menos de un minuto, tiene el efectivo en sus manos sin tener que usar allí su tarjeta de débito.
A tono con los avances de la tecnología y la Internet, BMO Harris abrió en Pilsen su segunda Sucursal Inteligente (Smart Branch), que permite al usuario tener acceso a un sinnúmero de servicios que hasta ahora solo se realizaban en un banco tradicional o, en algunos casos, a través de la red.
Este nuevo Centro de Contacto del Cliente, como se denomina, fue abierto en la remodelada sucursal de la calle 18 y Blue Island.
Además del “Video Teller”, que da acceso inmediato a un banquero a través de la pantalla del cajero, la compañía estableció el Video Experts, gracias al cual los clientes pueden hablar con un especialista, por ejemplo, en hipotecas o planes de retiro, mediante una sala de videoconferencia instalada en una oficina de la sucursal.
“La experiencia del usuario continua siendo la principal prioridad, ya que sus preferencias y deseos de cómo quieren ser asistidos por su banco favorito siguen evolucionando. Nuestras sucursales Smart Branch están diseñadas para proporcionales a nuestros clientes una experiencia como ninguna, pues se anticipan a sus necesidades”, afirma la compañía.
La Sucursal Inteligente también dispone de WI-FI pública y pantallas digitales que posibilitan al cliente el uso de dispositivos móviles para realizar sus operaciones bancarias y obtener más información acerca de la compañía. (Migdalis Pérez)