Redacción Negocios Now
El mercado inmobiliario ha perdido millones de lugares de bajo alquiler y las nuevas construcciones son en su mayoría de alta gama, por lo que personas de todos los niveles de ingresos se han visto afectadas por los aumentos del precio del alquiler desde la pandemia.
Un informe del Centro Conjunto de Estudios de Vivienda de la Universidad de Harvard asegura que la vivienda ahora es inasequible para una cifra récord de la mitad de todos los inquilinos de Estados Unidos.
Durante la pandemia de COVID-19, la mitad de los inquilinos estadounidenses gastaron más del 30 % de sus ingresos en alquiler y servicios públicos. De esas personas, casi la mitad sufría una grave carga de costos y pagaba más del 50 % de sus ingresos.
“Cada vez más hogares de este tipo, y muchos otros también, tienen dificultades para pagar el alquiler. De hecho, hubo aumentos en todas las categorías de ingresos que analizamos, lo que, en cierto modo, nos sorprendió”, dijo Whitney Airgood-Obrycki, investigadora asociada principal del centro.
Desde 2019, el mayor aumento en la no asequibilidad se produjo en los hogares que ganaban entre $30,000 y 74,999 dólares al año. Incluso, entre quienes trabajan a tiempo completo, un tercio de todos los inquilinos, todavía tenían que soportar costos elevados.
Mientras que entre los inquilinos que ganan menos de $30,000, quienes ya enfrentaban la lucha más severa para pagar una vivienda, el análisis encontró un aumento a un máximo histórico del 83 %, que está agobiado por los costos, precisó Airgood-Obrycki.
“Es posible que no vivas en un vecindario tan bueno, que tengas que viajar más lejos, incluso podrías estar sacrificando la calidad de tu sistema escolar”, afirmó, “Y con frecuencia lo que vemos es que las personas que intentan hacer estas concesiones, terminan pagando demasiado por la vivienda”.
El informe de Harvard indica que las tasas de población sin hogar en Estados Unidos alcanzaron un nivel récord el año pasado, situación que los expertos vinculan directamente con una grave escasez de viviendas que ha contribuido a elevar los precios.
Según el reporte, la nueva vivienda es de precio elevado debido al costo de construcción, y porque hay mucha demanda por parte de inquilinos con ingresos más altos. La mayoría de los alquileres se ubican en $1,400 al mes o más, lo que no es asequible para gran parte de los inquilinos.
Al mismo tiempo, dice, el mercado ha perdido millones de unidades de bajo alquiler, por $600 dólares al mes o menos. “Y estas tendencias continúan una brecha creciente y de largo plazo en lo que la gente puede permitirse”, agregó Airgood-Obrycki.
En consecuencia, hay millones de personas más que califican para recibir subsidios federales de vivienda. Sin embargo, reconoce, el financiamiento de estos apoyos ha sido insuficiente y la cantidad disponible ha quedado aún más por debajo de las necesidades.