Redacción Negocios Now
En 2022, gigantes tecnológicos, como Microsoft, Amazon y Google, invirtieron miles de millones de dólares en nuevas empresas de inteligencia artificial (IA), al tiempo que cobraron a esos negocios incipientes una cantidad similar por usar sus plataformas en la nube, de acuerdo con un artículo difundido por el Wall Streel Journal (WSJ).
«Estos acuerdos están convirtiendo a las grandes empresas tecnológicas en los mayores patrocinadores y beneficiarios más directos de estas nuevas empresas, lo que refleja cómo algunas de las mayores recompensas del auge de la IA siguen llegando a los actores más poderosos», puntualizó el reporte.
Si esta situación es llamativa, más lo es el hecho de que «el valor de las apuestas de los gigantes tecnológicos podría dispararse si las nuevas empresas despegan. Y si no, remarcó el informe, igualmente habrán convertido grandes cantidades de efectivo en ingresos».
Todo parece indicar que, para las nuevas empresas, los acuerdos con las ‘big techs’ son ventajosos, toda vez que el capital recibido les sirve para experimentar con modelos avanzados de IA y acceder a la potencia informática esencial para desarrollar e implementar productos, como ChatGPT.
«La simbiosis entre las nuevas empresas de IA y los gigantes tecnológicos está dejando de lado a los capitalistas de riesgo, que normalmente respaldan a las empresas jóvenes. Esos inversores rara vez gastan miles de millones y han sido más cautelosos a la hora de pagar las altas valoraciones que acompañan a los grandes acuerdos», agregó el texto.
Como ejemplo de lo que está sucediendo, el reporte señaló que, «en septiembre, Amazon anunció un acuerdo para invertir hasta cuatro mil millones de dólares en Anthropic, un rival del creador de ChatGPT, OpenAI». Anthropic, por su parte, se comprometió a gastar la misma suma en la nube de Amazon, Amazon Web Services, durante los próximos cinco años.
La propia fuente puso otro ejemplo con Google. Este gigante, «que a principios de año había invertido en Anthropic, acordó recientemente invertir hasta dos mil millones de dólares más en la startup. Ese nuevo compromiso se produjo meses después de que la startup acordara gastar más de tres mil millones de dólares en Google Cloud».
Por lo que ha trascendido hasta la fecha, Amazon y Google no han hecho más que seguir a Microsoft, «que ha invertido 13 000 millones de dólares en OpenAI. Mientras tanto, OpenAI está gastando miles de millones de dólares en la nube de Microsoft».
Margaret Jennings, cofundadora de la startup de inteligencia artificial Kindo y exempleada de OpenAI, dijo al WSJ que «para los proveedores de la nube, [este] es un golpe maestro. El dinero de su inversión se recupera y, ahora, tienen acceso directo a [saber] cómo los equipos de investigación y productos de estas nuevas empresas están desarrollando su estrategia».
