Redacción Negocios Now
La Administración de Donald Trump busca financiación privada para la tradicional celebración de Pascua en la Casa Blanca a través de la firma organizadora de eventos Harbinger. Según reveló The New York Times, los patrocinadores corporativos tendrán varios niveles de apoyo, que van desde los 75.000 hasta los 200.000 dólares,
Conocido como Easter Egg Roll, el tradicional evento deviene una fiesta familiar en los jardines de la Casa Blanca, donde los niños participan en carreras de huevos de Pascua. Este año, las empresas podrán asociarse con la celebración a cambio de visibilidad de marca, experiencias VIP y acceso exclusivo a ciertos eventos, como un brunch con la primera dama, Melania Trump, reservado para los patrocinadores del nivel más alto.
Beneficios para los patrocinadores
El folleto promocional, de nueve páginas, explica que los patrocinadores no solo ayudarán a financiar el evento sin costo para los contribuyentes, sino que también obtendrán reconocimiento nacional y oportunidades de marketing. Entre los beneficios se incluyen:
- Derechos de denominación en áreas clave del evento
- Colocación de logotipos en la señalización y materiales oficiales
- Regalos de marca (cestas, snacks, bebidas o souvenirs personalizados)
- Menciones en redes sociales y comunicaciones oficiales de la Casa Blanca
Además, los patrocinadores tendrán acceso a experiencias exclusivas, como recorridos por la Casa Blanca, sesiones fotográficas con invitados especiales y encuentros con la prensa que cubre la presidencia.
Distintos niveles de patrocinio
La oferta de patrocinio está dividida en tres niveles:
- Platino ($200.000): Incluye cuatro invitaciones VIP, acceso a eventos exclusivos y el esperado brunch con Melania Trump
- Oro ($125.000): Brinda dos invitaciones VIP, aunque sin acceso al brunch con la primera dama
- Plata ($75.000): Proporciona visibilidad de marca y ciertas ventajas en la celebración, pero con menos exclusividad.
Tradición con un giro comercial
Aunque en otras administraciones se ha contado con apoyo privado para ciertos eventos, esta es la primera vez que la Casa Blanca promueve de forma abierta y estructurada un sistema de patrocinio corporativo para la fiesta de Pascua.
Mientras algunos ven la medida como una forma de reducir el gasto público, otros critican que una tradición presidencial se convierta en una oportunidad de negocio para las marcas.