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Las cosas más molestas que hacen los extranjeros cuando visitan ciertos países

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En la mayoría de países sus habitantes saben de la importancia del turismo y tratan de ser hospitalarios con el visitante, pero eso no impide que haya conductas del extranjero que los nativos aborrecen.

El sitio ThisIsInsider.com realizó una encuesta entre pobladores de 14 países sobre las cosas más molestas que hacen los extranjeros en su país repetidamente, y estos son algunos resultados de muchas quejas expuestas:

En Dinamarca los daneses aborrecen a los turistas que ignoran la diferencia entre la acera de la calle y el carril de bicicletas, y transitan en este con su equipaje, deteniéndose para tomarse fotos. Mientras que en Alemania odian a quienes se toman selfies en sitios que honran a las víctimas del Holocausto, y peor aún si lo hacen tratando de personificar a Hitler.

En Italia detestan a los extranjeros que creen que es un país sin leyes y pueden bañarse en la Fuente de Trevi, orinar en las calles en las noches, subirse a las estatuas que adornan los centros históricos. Además, les molesta que los extranjeros asuman que todos hablan inglés y pidan comida italiana americanizada, como pizza de piña, fettuccine Alfredo y espagueti con albóndigas.

En India los extranjeros más repudiados son los que según buscan la paz a través de meditación y yoga, pero terminan en manos de falsos gurús siguiendo prácticas ridículas, y aquellos que toman fotos en barrios marginales. En Indonesia no soportan ver a mochileros occidentales mendigando ayuda para financiarse sus vacaciones, y tampoco conduciendo motos sin precaución.

En Tailandia sus habitantes odian que los turistas se tomen fotos con tigres, que drogan, solo para presumir en sus redes sociales, ya que para atender esta demanda los animales salvajes sufren. En Noruega los turistas insisten en acercarse demasiado a los glaciares, a pesar de que tienen cercas y señales de advertencia por la simple razón de que frecuentemente matan personas.

En Reino Unido los habitantes consideran molesto que los visitantes hablen en voz alta en el metro, especialmente durante las horas pico. Mientras que los australianos encuentran muy odioso que los extranjeros en su país conduzcan por el lado equivocado de la carretera (a la derecha en lugar de a la izquierda), además de peligroso.

En Nueva Zelanda molesta que los extranjeros crean que los locales sólo entienden inglés, y hablen irrespetuosamente en voz alta en su idioma. Mientras que la mayor queja en el medio oeste de Estados Unidos es que busquen como especie rara a los pobladores Amish, porque observarlos y fotografiarlos se considera una acción grosera.

Tomar selfies en los Lagos de Plitvice en Croacia es más peligroso que molesto para los croatas por la gran cantidad de muertos y heridos que deja esa práctica, a pesar de las advertencias. Y en Brasil es demasiado desagradable la frecuente costumbre de los turistas de tomar tours por las favelas sonrientes con sus cámaras, muchos incluso vestidos con estampado de camuflaje, con la emoción de entrar a una zona de guerra urbana.