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Identifica Chicago estatuas problemáticas

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La ciudad identificó 41 monumentos potencialmente problemáticos, incluidas cinco estatuas de Abraham Lincoln,  convertidos en “un punto focal de conversación, protesta y activismo”, y  pidió a los residentes comentarios sobre qué hacer con ellos a través del sitio web Chicago Monuments Project.

El Comité Asesor del Proyecto de Monumentos de Chicago, que se formó a partir de protestas del verano pasado centradas en estatuas de personajes históricos, elaboró la lista después de examinar 500 esculturas monumentales, placas conmemorativas y otras piezas de arte público de los siglos XIX y XX.

Los 41 monumentos elegidos están relacionados con “la promoción de narrativas de supremacía blanca, presentación de caracterizaciones inexactas o degradantes de los indios americanos, y conmemoración de personajes históricos relacionados con actos racistas, esclavitud y genocidio”, dijo el comité.

Otros criterios para seleccionarlas son: presentan vistas de la historia selectivas, simplificadas y unilaterales; no incluyen otras historias, en particular de mujeres, personas de color y temas de trabajo, migración y construcción de comunidades; crean conflicto entre grupos de personas que disienten sobre su valor artístico; y han sido objeto de críticas durante años.

Entre los monumentos potencialmente problemáticos se encuentran el del Centenario de Illinois, en el corazón de Logan Square, cinco estatuas de Lincoln, dos de George Washington,  dos de Cristobal Colón, una de Ulysses S. Grant, Benjamin Franklin, Italo Balbo, y representaciones de pueblos indígenas.

De acuerdo con un comunicado del Departamento de Asuntos Culturales y Eventos Especiales, los monumentos y memoriales se identificaron como piezas que necesitan una “revisión adicional” por lo que se someterán a discusión pública, aunque no se precisó qué pasará con ellos una vez que los residentes emitan sus comentarios.

Los residentes pueden revisar y comentar las obras de arte a través del sitio web y opinar sobre la forma en que Chicago debería conmemorar su historia, así como participar en discusiones virtuales. La retroalimentación servirá para definir nuevos monumentos que reconozcan de manera equitativa la historia compartida de Chicago, según la ciudad.