El Grupo Fiat Chrysler Automobiles retirará cerca de 965,000 vehículos de gasolina en los Estados Unidos y Canadá que no cumplen con los estándares de emisiones y reemplazará sus convertidores catalíticos, informó FCA.
La decisión fue resultado de las investigaciones de emisiones en uso realizadas por la EPA y pruebas en uso realizadas por Fiat Chrysler, según lo exigen las regulaciones estadounidenses, y los resultados primero fueron difundidos por la agencia de gobierno.
El retiro cubre casi 863,000 vehículos estadounidenses y 103,000 vehículos canadienses, dijo Fiat Chrysler. Entre ellos se encuentran: Dodge Journeys 2011-2016, Chrysler 200s y Dodge Avengers 2011-2014, Dodge Calibers 2011-2012 y Jeep Compass / Patriots 2011-2016, precisó la armadora en su portal.
El fabricante de automóviles aseguró que el retiro de vehículos no tiene implicaciones relativas a la seguridad, y tampoco existen multas asociadas a los resultados de los exámenes. Dijo que las pruebas en la carretera mostraron un deterioro en el rendimiento de los convertidores catalíticos.
El problema, precisó, fue descubierto por la empresa durante las pruebas de emisiones de uso rutinarias y se notificó a la agencia de gobierno. De inmediato FCA empezó a contactar a los clientes afectados el mes pasado para informarles sobre las reparaciones necesarias, que se proporcionarán sin costo alguno.
La EPA dijo que el retiro se hará en fases este año debido a la gran cantidad de vehículos involucrados y la necesidad de encontrar suministros de convertidores catalíticos. Advirtió que continuará investigando otros vehículos Fiat Chrysler que potencialmente no cumplen con los requisitos y que podrían ser objeto de futuros retiros.
La primera respuesta a la noticia la dio en California la Junta de Recursos del Aire, al anunciar que se deberán reparar 50,000 vehículos FCA que emitieron contaminación por óxido de nitrógeno (NOx) por encima de los límites reglamentarios o de lo contrario no pasaran los registros. Destacó que los propios datos y resultados de las pruebas de Fiat Chrysler confirmaron que los convertidores catalíticos de estos vehículos no funcionaban.
Las emisiones de NOx en California son un importante contribuyente al ozono ambiental y a la contaminación de partículas finas, que se asocia con visitas a la sala de emergencias por asma, incrementando hospitalizaciones debido a enfermedades crónicas del corazón y los pulmones y otros problemas de salud graves.
