Redacción Negocios Now
Luego de que el presidente Joe Biden anunciara la cancelación de la deuda estudiantil a 35 000 personas, como había prometido, un tribunal federal de apelaciones impidió que el mandatario continue implementando su nuevo plan de alivio, de acuerdo con un reporte de Reuters.
Según ese informe, “el Tribunal de Apelaciones del Octavo Circuito de EE. UU., con sede en St. Louis, concedió una solicitud de siete estados liderados por republicanos para suspender partes del plan de alivio de la deuda del Departamento de Educación que aún no habían sido bloqueadas por un tribunal inferior”.
Este jueves, el presidente había anunciado que su Administración está cancelando la deuda estudiantil de 35 000 personas a través de la condonación de préstamos por servicio público, elevando el número total de estadounidenses que se han beneficiado de sus diversas acciones de alivio de la deuda a 4,76 millones de personas.
Según una declaración de la Casa Blanca, “cada uno de esos prestatarios ha recibido un promedio de más de $35 000 en cancelación de deuda. Estos 35 000 prestatarios aprobados para la condonación son trabajadores de servicios públicos: maestros, enfermeras, funcionarios encargados de hacer cumplir la ley y socorristas que han dedicado sus vidas a fortalecer sus comunidades y, debido a las correcciones que hicimos en la condonación de préstamos por servicio público, ahora tendrán más espacio para mantenerse a sí mismos y a sus familias”.
De acuerdo con el mismo texto, el anuncio “se suma al importante progreso que hemos logrado para estudiantes y prestatarios durante los últimos tres años. Eso incluye proporcionar los mayores aumentos a la Beca Pell en más de una década, fijar el pago basado en los ingresos para que los prestatarios obtengan el alivio al que tienen derecho según la ley, y responsabilizar a las universidades por aprovecharse de los estudiantes y las familias”.
Biden dijo que, a principios de este año, expuso los nuevos planes de su Administración que cancelarían la deuda estudiantil de más de 30 millones de estadounidenses, en combinación con todo lo que ha hecho hasta ahora.
“Desde el primer día de mi Administración, subrayó, prometí luchar para garantizar que la educación superior sea un boleto para la clase media, no una barrera para las oportunidades. Nunca dejaré de trabajar para que la educación superior sea asequible, sin importar cuántas veces los funcionarios republicanos electos intenten detenernos”.