Por Billy Russo
Los White Sox ya lo tienen todo listo para esta temporada del 2016 en la que han preparado una verdadera maquinaria para iniciar con fuerza en los confines del U.S. Cellular Field, en toda el área de Chicago y en Grandes Ligas.
Tras la decepción que se vivió en el terreno durante la temporada pasada, los White Sox trabajaron intensamente durante el invierno para estructurar un equipo que le brinde satisfacciones y alegrías a todos sus seguidores, y que además refuerce esos avances sociales que desde hace décadas ha venido realizando en la comunidad de Chicago y sus alrededores.
Con la vista puesta en ese objetivo el equipo contrató y adquirió a nuevos peloteros, que no solo lo hacen mejor sino que se amalgaman a la filosofía de la organización. Entre las adiciones que hizo la novena se cuentan la de los receptores latinos, Dioner Navarro (venezolano) y Alex Ávila (de descendencia cubana); además de la de los jugadores de posición Todd Frazier (tercera base), Brett Lawrie (segunda base), Jimmy Rollins (campocorto), Austin Jackson (jardinero) y Matt Latos (lanzador), entre otros.
Estos jugadores llegan para sumarse a la causa que desde hace ya dos años ha liderado el primera base cubano José Abreu, quien es la figura del equipo dentro y fuera del terreno de juego. Junto a él, ya establecido en los White Sox también está el pitcher zurdo colombiano José Quintana, quien para esta temporada tendrá la motivación de ser padre, ya que en el mes de enero nació su primera hija Ariadna Michell.
Abreu, quien durante el invierno contrajo matrimonio y pudo volver a Cuba para reencontrarse con su hijo, procurará liderar una vez más la ofensiva de los White Sox de la misma forma en la que impulsa su fundación “Abreu’s Amigos”, que desde el 2015 se encarga de ayudar a los niños de Easter Seals Metropolitan Chicago (ESMC).
Mientras tanto los jardineros, Avisail García (venezolano) y Melky Cabrera (dominicano) buscarán la consistencia que complemente una vez más el surgimiento de los White Sox. Ambos realizaron cambios para esta campaña y trabajaron intensamente para brillar.
Pero el brillo que buscan los White Sox y sus jugadores va más allá del terreno de juego, es por ello que para esta campaña la organización también realizó mejoras significativas para hacer de la visita de los aficionados al U.S. Cellular Field una experiencia especial, divertida y entretenida.
Este año el equipo estrenará tres pantallas gigantes, una en cada jardín, siendo la del central una de las más grandes y de mejor calidad entre todos los estadios de Grandes Ligas. Además, habrá nuevos sitios de comida, con más variedad y por supuesto con sabor y sazón latino.
Con las modificaciones en su rosters y las mejoras en el sistema de entretenimiento los White Sox esperan celebrar en el U.S. Cellular Field con los aficionados de una excepcional campaña, en la que también habrán días de fiesta, como el Día de la Familia (23 de abril ), el Cinco de Miller (5 de mayo), la Noche del Orgullo Sox y la Noche de la Herencia Hispana (30 de septiembre).
En esas fechas especiales habrá regalos para los fanáticos, uno de los obsequios especiales será un peluche de José Abreu. Este se estará dando el 23 de abril y presentado por Total Performance Engine Oils.
Atender y captar a la afición latina, que año tras año ha ido creciendo dentro de la base de fanáticos, es uno de los objetivos principales que los White Sox se han propuesto este año. Pues los latinos siempre han sido parte importante en la filosofía de la organización, no solo a nivel deportivo en donde han contado con destacadas figuras como Minnie Miñoso, Luis Aparicio y Ozzie Guillén, entre otros, hasta llegar a José Abreu, José Quintana y Melky Cabrera, sino también a nivel social y comunitario.
Los White Sox, a través de su fundación y de sus obras de caridad, también estarán presentes en diferentes actos y festivales en las comunidades del área de Chicago prestando su ayuda y colaboración.
El esfuerzo de los White Sox por surgir y tener un 2016 exitoso en todos los frentes, dentro y fuera del terreno.
