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Cuando la vida en Pl-zen se torna DeColores

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Ese Pilsen bohemio y multifacético, cultivado con  de arte de primera, música latina, jazz y blues, barras elegantes y  cocina de clase forma un poderoso imán para las inversiones.

Víctor Pérez

Mientras que la mayoría de los barrios de Chicago  tienen una arteria comercial, Pilsen tiene dos.

La calle 18 y la avenida Halsted tienen un sabor distinto. O particular, digámoslo así.

La comida mexicana de DeColores parece estar atrincherada en el 1626 S. Halsted en el Distrito de Arte de East Pilsen, una zona que ha visto una transformación urbana con la llegada de vecinos blancos y que contrasta con el resto de Pilsen de inmigrantes mexicanos.

“Me ofende cuando escucho a la gente decir que Pilsen está dividido”, dijo Sergio Reyes, propietario y chef de DeColores. “Para mí Pilsen siempre ha sido un solo barrio”.

Como prueba bastan dos botones. Reyes ha participado en 18th Street Open Studios de West Pilsen, y en los llamados 2nd Fridays Gallery Night de East Pilsen.

“Yo participo en el evento de las galerías de la avenida Halsted y también ayudo a recaudar fondos para 18th St. Open Studios”, dijo Reyes. “Yo no hago diferencia cuando se trata de apoyar el arte de Pilsen”.

La barra de DeColores, cuyo eslogan es “Galería y sabores”, es en sí una pequeña obra de arte al estar adornada con temas alusivos al Día de los Muertos.

“Algunos clientes que vienen se hacen una foto con las Calaveras. Para nosotros esta fiesta mexicana es muy importante”, explica.

Y vaya que sí. DeColores abrió en el Día de los Muertos de 2009, y ya es un establecimiento premiado por su servicio. Pero una cosa son los reconocimientos culinarios y otra cosa son los retos del día al día.

“Este negocio es muy impredecible. Por ejemplo, podemos empezar un sábado sin reservaciones y terminar el día con casa llena. Así las cosas”, explicó Reyes. “Somos un negocio de familia. Eso significa que nosotros mismos nos tenemos apoyar financieramente”.

Y eso también significa intentar nuevas ideas.

Este verano De Colores estrena su licencia para vender licor con un novedoso menú de bebidas preparadas.

“Las bebidas, como las margaritas, serán hechas con ingredientes cien por ciento naturales, como toda la comida que hacemos aquí”, explicó Reyes.

Otras de las novedades veraniegas son las actuaciones de música en vivo con grupos de jazz.

Pl-zen

En octubre de 2012, César González abrió el gastro-pub Pl-zen en 1519 W. 18th St. en lo que por default es West Pilsen.

“Abrimos aquí (en West Pilsen) porque en East Pilsen ya estaban los lugares más ‘trendy’ como Simone’s y Honky Tonk”, explicó González, oriundo de la Ciudad de México.

“La frontera entre los dos Pilsen, por decirlo así, es la calle Racine. Es muy clara la diferencia entre un lado y el otro de esta calle”, agregó.

Según González, Pl-zen está inspirado en los gastro-pubs de Inglaterra e Irlanda de los años noventa.

En mayo, la hamburguesa de cordero mereció elogios de parte de usuarios de Yep.com.

Pero acá el menú de este sitio “hipster” cambia de un mes al otro.

“Al chef no le gusta tener siempre la misma carta de comida todo el tiempo. Él chef se aburre muy fácil –y yo lo entiendo y estoy de acuerdo con él”, dijo. “Quiero que nuestro menu sea más interesante, más experimental, más innovador.

Hijo de padres comerciantes, González considera que la vena artística y el espíritu empresarial van de la mano

“No puedes abrir un negocio sin tener un espíritu artístico y un espíritu empresarial. Tienes que tener ambos”, dijo.

“Yo veo un negocio, particularmente un restaurante, como un lienzo: Cada decisión que uno toma para poner madera, ladrillo… es como un poner un brochazo en el lienzo. Excepto que esas decisiones cuestan más que la pincelada”, añadió.

González considera que Pl-zen sobrevivió a su período de gestación. “No nos podemos quejar. Nos ha ido muy bien. Estamos contentos. Pero siempre nos puede ir mejor”, dijo.

En ese sentido, Pl-zen se ha ajustado a la todavía tierna recuperación de la economía nacional.

“Tienes que reducir costos, hacerlo tú mismo, y los precios tienen que adaptarse al barrio donde estás”, explicó.

Honky Tonk

Desde 1987 Willie Wagner y su esposa viven en la planta alta de su restaurante bar Honky Tonk en la esquina de la calle 18 y Racine, conocen a todos los vecinos y tienen amigos a la redonda de la esquina en esta zona donde empieza un Pilsen y termina el otro.

“Abrimos aquí porque Pilsen necesitaba un centro comunitario”, dijo Wagner, de 50 años. “A todo el mundo le gusta la ‘barbecue’ (barbacoa) y la ubicación es perfecta, pues la mejor ‘barbecue’ se encuentra a 50 calles de aquí”.

Todos los días de la semana, excepto el lunes porque el negocio cierra ese día, Honk Tonk sirve de escenario para todo tipo de música: jazz, blues, swing y hasta música latina.

“La mánager de Honky Tonk, Karie Leonardo, y yo somos eclécticos para contratar a los músicos que tocan aquí”, dijo Wagner.

¿Cuáles son los requisitos para poder tocar en Honky Tonk?

“Tocar música alegre, llena de energía, que te haga sentir que estás vivo”, explica Wagner.

“La gente viene de Pilsen y fuera de Pilsen. Ellos quieren vivir la experiencia de la BBQ y buena música”

“Cuando la gente viene se sienten como que están en un lugar diferente por la música de los treinta, cuarenta y cincuenta, y todo este arte de la primera mitad del siglo pasado”, dijo Wagner.

 

“Venir a Honk Tonk es más que una experiencia culinaria: es una experiencia para todos